Factoraje
19 de diciembre de 2024
La gran mayoría de las empresas, en México y en el mundo, inician operaciones con un producto o servicio. El foco de la compañía es comercializarlo lo mejor posible, con los recursos con los que se cuenta, para capturar un pedazo del mercado y empezar a construir su marca, afianzar clientes y buscar un crecimiento sostenido en ventas.
La gran mayoría de las empresas, en México y en el mundo, inician operaciones con un producto o servicio. El foco de la compañía es comercializarlo lo mejor posible, con los recursos con los que se cuenta, para capturar un pedazo del mercado y empezar a construir su marca, afianzar clientes y buscar un crecimiento sostenido en ventas.
La innovación es un pilar que toma importancia hasta después, ya que la empresa se ha establecido y cuenta con una operación más o menos estable. Sin embargo, el hecho de depender de un solo producto, servicio o incluso de uno o dos clientes, supone un riesgo enorme para cualquier empresa en desarrollo. Dicho riesgo se puede presentar de varias maneras, por ejemplo, que la demanda del producto que se comercializa disminuya, mermando el flujo de la empresa. Otro ejemplo es el hecho de que las condiciones comerciales o de crédito sobre las ventas sean muy prolongadas y al no tener una cartera de clientes más versátil, la empresa pueda ver comprometido su flujo de efectivo. Sin duda, son factores que ponen en riesgo la existencia de la empresa y pueden suponer un fracaso que podría haberse evitado.
Una de las claves para evitar que eso suceda, es la diversificación. Contar con un portafolio de productos y servicios más versátil es una opción saludable a largo plazo, ya que los clientes que hayan probado un producto o servicio, pueden volverse clientes de otro ofrecido por la misma empresa. El contar con varios clientes, de diferentes características también es una forma de diversificar y reducir el riesgo de dependencia de la empresa. Por ejemplo, clientes con condiciones de pago a 7 días que ayudan a compensar a aquellos que pagan hasta 90 días, así como clientes pequeños que compran de manera recurrente y aportan estabilidad al flujo, en comparación con clientes que hacen compras grandes, pero de manera esporádica.
Así que ya lo sabes, si en tu empresa dependen de manera notable de un producto o de un cliente, probablemente es momento de empezar a pensar en buscar nuevos clientes o lanzar más productos que te permitan diversificar el riesgo y lograr un crecimiento, incluso, en contextos complejos de tu industria o los países en los que opera tu empresa. Con respecto a los recursos, acércate a nosotros y déjanos asesorarte con una solución rápida y efectiva que puede ayudarte a recibir recursos de manera inmediata, con el respaldo de tus ventas por cobrar. Conoce más en: kredfeed.com/#beneficios